¿Qué es la Hidradenitis?

¿Tienes folículos infectados? ¿Tienes los típicos bultitos en la axila, ingles, nalgas…?

La hidradenitis supurativa es una enfermedad de la piel, no contagiosa, que se caracteriza por una inflamación crónica del epitelio folicular. Los pacientes afectados presentan lesiones supurativas con distribución simétrica. Se localiza más frecuentemente en las axilas, ingles y bajo de los pechos, en el surco submamario, en el ano… Las protuberancias de la hidradenitis supurativa se forman porque los folículos pilosos se tapan y se llenen de bacterias que los infectan provocando inflamación. Los abscesos (bolsas llenas de pus) producidos son sensibles al tacto, dolorosos, malolientes, pueden crecer hacia dentro de la piel y tienden a reaparecer después de curarse. Después de repetidas curaciones y reaparición de nuevo de los abscesos, en ese mismo lugar, la piel de la zona se engrosa y presenta cicatrices. A menudo, se forman canales permanentes, llamados trayectos fistulosos, entre el absceso y la superficie de la piel, y supuran.

La hidradenitis supurativa puede ser: 

  1. Leve: solo hay uno o algunos bultos en un área de la piel. El estadio I de esta enfermedad consiste en la producción de abscesos, sin trayectos fistulosos ni cicatrización. A menudo, un caso leve empeorará y se convertirá en una enfermedad moderada.
  2. Moderada: incluye recurrencias de las protuberancias que se agrandan y se rompen. Cuando aparecen abscesos de forma periódica, ampliamente separados, así como con trayectos fistulosos y cicatrices, se trata del estadio II.
  3. Graves: hay protuberancias generalizadas, cicatrices y dolor crónico que pueden dificultar el movimiento cuando en el paciente aparecen numerosos trayectos fistulosos interconectados y abscesos que afectan a zonas completas se trata del estadio III.

La hidradenitis supurativa no es causada por una infección o por una higiene deficiente, y no es contagiosa. Se desconoce la causa exacta pero puede estar relacionada con las hormonas, la predisposición genética, el hábito de fumar o el sobrepeso.

Factores de riesgo:

  • Edad. El riesgo de padecerla es mayor para las personas que se encuentran entre veinte y treinta años. 
  • Sexo. Las mujeres tienen más probabilidades de desarrollarla que los hombres.
  • Raza. La etnia y la raza pueden afectar al nivel de riesgo. La prevalencia es más alta entre las personas de raza negra.
  • Antecedentes familiares. La tendencia a desarrollar hidradenitis supurativa podría ser hereditaria.
  • Determinadas afecciones. 
  • Hábito de fumar. 

Complicaciones de la Hidradenitis Supurativa:

La hidrosadenitis supurativa persistente y grave a menudo puede causar complicaciones, incluidas las siguientes:

  • Infección. El área afectada es susceptible a una infección secundaria, pero la presencia de pus es común en la hidradenitis supurativa y no necesariamente implica que haya una infección.
  • Cicatrices y cambios en la piel. Las heridas pueden sanar, pero dejan cicatrices similares a marcas causadas por una cuerda o piel con hoyos.
  • Movimiento restringido. Las úlceras y el tejido cicatricial pueden causar movimiento limitado o doloroso, especialmente cuando la enfermedad afecta a las axilas o a los muslos.
  • Cáncer de piel. El carcinoma de células escamosas se relaciona con la hidradenitis supurativa a largo plazo, especialmente en personas cuya afección involucra el área perianal.
  • Hinchazón en los brazos, las piernas o los genitales. Los sitios más comunes para la hidradenitis supurativa también contienen muchos ganglios linfáticos. El tejido cicatricial puede interferir en el sistema de drenaje linfático, lo que puede ocasionar hinchazón en los brazos, las piernas o los genitales.
  • Efectos psicológicos y aislamiento social. La ubicación, el drenaje y el olor de las llagas pueden causar vergüenza y reticencia a salir en público, lo que conduce a la ansiedad o a la depresión.

Tratamiento de la hidradenitis supurativa:

El tratamiento de esta enfermedad varía y se basa en sus síntomas, pero es recomendable lavar la piel con un jabón antiséptico sin perfume y no tocarse con las manos, sin antes haberlas desinfectado con gel hidroalcohólico.

Como complemento al tratamiento convencional podría resultar muy beneficioso lavar las areas de la piel afectadas con agua de mar hipertónica ozonizada embotellada, dado que al estar ozonizada tiene propiedades antimicrobianas y las sales contenidas en el agua de mar benefician la cicatrización de heridas.

Se deben elegir desodorantes para piel sensible que no contengan alcohol, ni aluminio, ni siliconas, ni parabenos, formulados para pieles sensibles.

1- Tratamiento farmacológico

  • Antibióticos tras realización de cultivo microbiológico
  • Corticoesteroides tópicos, u orales
  • Retinoides tópicos y/u orales
  • Antiandrógenos   
  • Fármacos biológicos 

2- Depilación láser: en estos pacientes la depilación es importante ya que el problema se origina en el folículo piloso.

3- Infiltraciones ecoguiadas.

4- Cirugía menor: Drenaje de abscesos y extirpación únicamente de los trayectos fistulosos con láser de CO2.

5- Cirugía mayor: Tratamiento quirúrgico con extirpación de toda la piel afectada y reconstrucción de las lesiones locales

TRATAMIENTO FARMACÓLOGICO DE LA HIDRADENITIS

a) Tratamiento de la Hidradenitis obstruyendo el folículo piloso:

Retinoides, que pueden usarse directamente sobre la zona afectada de la piel, pero más comúnmente por vía oral. Deben ser prescritos por su dermatólogo. Debe controlarse los efectos secundarios frecuentes, que son la sequedad de piel y mucosas, la caída de pelo, los efectos sobre la función hepática y los niveles de lípidos en sangre. En mujeres debe evitarse el embarazo mientras se trata la hidradenitis de esta forma y un periodo posterior variable según el fármaco, por lo que se deben administrar asociados a anticonceptivos. Suelen administrarse en tandas largas de 6 a 12 meses.

b) Tratamiento de la Hidradenitis controlando la respuesta inflamatoria:

Corticoides: Pueden utilizarse corticoides, en general en pautas muy cortas, mediante una inyección en las zonas inflamadas.

Antibioticos: Controlan la inflamación, juntamente con el control de la sobreinfección bacteriana: tetraciclinas, las asociaciones de rifampicina y clindamicina…

Inmunosupresores:  Los fármacos inmunosupresores requieren un seguimiento estricto mediante analíticas y visitas médicas para controlar sus efectos secundarios, que son variables según el fármaco. Existe cierta variabilidad en su respuesta.

Biológicos: Recientemente se ha demostrado la utilidad de los fármacos biológicos para el control de la enfermedad. En el 2015, el medicamento Adalimumab fue aprobado por la Comisión Europea para el tratamiento de la Hidradenitis Supurativa moderada a grave. Este fármaco actúa bloqueando una sustancia que produce el sistema inmunitario llamada TNFalfa, que está claramente aumentada en la respuesta inflamatoria de los pacientes con hidradenitis supurativa. Los fármacos biológicos disminuyen las lesiones inflamadas y previenen la aparición de nuevas lesiones. Si la respuesta es satisfactoria, se utilizan en pautas continuas, durante años. Antes de su administración, deberá descartarse la presencia de infecciones activas, como la tuberculosis, y se realizarán exámenes de sangre cada 3 meses.

c) Tratamiento de la Hidradenitis por sobreinfección:

En casos en que se identifica una sobreinfección, se pueden indicar tratamientos antibióticos, en general se opta por tetraciclinas o bien la combinación de rifampicina y clindamicina, durante pautas largas, de 3 meses. En algunas ocasiones, estas pautas pueden variar según los gérmenes hallados en los cultivos de piel. Es frecuente aconsejar tratamiento de mantenimiento con clindamicina tópica de aplicación cada 12 horas en las áreas afectadas.

d) Otros tratamientos de la enfermedad:

En algunas ocasiones, en las que se detecta alguna alteración hormonal, pueden ser útiles tratamientos que bloquean las hormonas androgénicas, como algunos anticonceptivos, la espironolactona, el finasteride …

Existen algunos estudios que el bloqueo de la hormona insulina resulta beneficiosa, por lo cual se usan fármacos como la metformina.

En algunas ocasiones, asociado a tratamientos médicos o de forma aislada se opta por tratamientos quirúrgicos. La incisión y drenaje de los abscesos alivia los síntomas asociados a la inflamación, especialmente el dolor. Se puede optar por la extirpación de las lesiones en bloque, especialmente cuando existen fístulas, que tienen poca tendencia a la curación espontánea.  En algunas ocasiones se procede a retirar las estructuras profundas de la zona afectada, para resolver las lesiones inflamadas existentes y evitar la aparición de nuevas lesiones. Las heridas se dejan abiertas durante un tiempo variable y se espera a la cicatrización progresiva.

Es importante acudir al médico, dado que cuanto antes se diagnostique y el paciente comience el tratamiento mas favorable será la evolución de esta enfermedad.

¿Tienes dudas? ¡No te olvides de seguir a Farmadirecto24, farmacia online en redes sociales para enterarte de todo!

Síguenos en las Redes Sociales:

Últimas publicaciones

TRATAMIENTOS PARA LAS ALERGIAS

1- INMUNOTERAPIA Cuando se presenta una patología alérgica, es esencial determinar qué alergeno es el responsable y tomar medidas para evitar el contacto con él.

ALERGIAS PRIMAVERALES

La primavera es una época del año en la que muchas personas experimentan alergias, lo que puede llevar a problemas de salud como trastornos dermatológicos